Se escuchó el grito de “bolsa, bolsa” alrededor de las cuatro de la tarde del domingo, señalando el descubrimiento de otro cuerpo bajo el barro. Los equipos de rescate, incluyendo bomberos y la Defensa Civil, descendieron rápidamente para recuperar el cuerpo de un hombre víctima del derrumbe en El Carmen de Atrato, ocurrido el viernes en una zona rural cerca de la vía entre Quibdó y Medellín.
A pesar de la paradoja, el deslizamiento solo afectó la casa de la familia Mazo, donde alrededor de 50 personas se refugiaban de la lluvia. Luis Mosquera, un testigo, señaló la importancia de ubicar los cuerpos rápidamente debido al calor y destacó la paradoja de que solo un segmento de tierra cayó sobre la casa donde se resguardaban.
Según la Policía Nacional, aún se estima que hay entre cinco y siete personas desaparecidas, incluyendo la esposa del patrullero Reison Restrepo, quien está trabajando en las labores de búsqueda y rescate. El director de la Policía Nacional, el general William René Salamanca, expresó su solidaridad con las 14 familias de policías que perdieron a sus seres queridos en la tragedia.
Las operaciones de rescate continúan, y se mantiene la esperanza de encontrar sobrevivientes. La cifra de víctimas fatales podría ascender a 35 con los últimos cuerpos recuperados. El director de la Policía se reunió con la gobernadora Carolina Córdoba en el Puesto de Mando Unificado (PMU).
