El sistema de salud del departamento del Quindío se encuentra al borde del colapso debido a una crisis financiera sin precedentes. La Secretaría de Salud departamental ha revelado que las deudas de varias EPS a las Instituciones Prestadoras de Servicios de Salud (IPS) superan los $180.000 millones de pesos, poniendo en riesgo la atención médica de miles de ciudadanos.
Las IPS más afectadas por esta crisis incluyen el Hospital Universitario San Juan de Dios, la Clínica La Sagrada Familia y la Clínica Central. Estas entidades, que ofrecen servicios de alta complejidad, se enfrentan a graves problemas de liquidez que amenazan su capacidad para pagar nóminas al personal médico y administrativo, cumplir con proveedores de insumos médicos y mantener la calidad y oportunidad en la atención a pacientes.
El Hospital Universitario San Juan de Dios enfrenta una situación económica compleja debido a la alta cartera pendiente por parte de diversas E.P.S. Entre los principales deudores se encuentran Asmet Salud, con una deuda de $9.113.201.270; Sanitas, que adeuda $2.414.698.221; Nueva EPS, con la suma más elevada de $21.992.886.732; Sura, que tiene pendiente el pago de $5.199.196.129; y S.O.S., con una deuda de $886.390.505. Esta situación afecta significativamente la capacidad operativa y financiera del hospital.
La Clínica La Sagrada Familia enfrenta una considerable deuda por parte de varias E.P.S., lo cual afecta su operatividad financiera. Asmet Salud debe $4.372.386.885, mientras que Sanitas tiene una deuda de $4.687.757.871. La deuda más significativa proviene de Nueva EPS, que asciende a $84.276.530.143. Sura adeuda $9.299.482.868 y S.O.S. tiene pendiente el pago de $22.581.129.245. Esta situación financiera crítica requiere soluciones urgentes para mantener la calidad y continuidad de los servicios de salud ofrecidos por la clínica.
La Clínica Central del Quindío enfrenta una situación económica complicada debido a las deudas acumuladas por varias E.P.S. Asmet Salud tiene una deuda de $1.030.000.000, mientras que Sanitas adeuda $3.830.000.000. Nueva EPS debe $3.355.000.000 y Sura, con una de las deudas más altas, adeuda $6.002.000.000. Por su parte, Salud Total tiene una deuda pendiente de $1.741.000.000. Esta acumulación de deudas impacta negativamente la capacidad financiera de la clínica, poniendo en riesgo la continuidad y calidad de sus servicios de salud.
El secretario de Salud del Quindío, Carlos Alberto Gómez Chacón, manifestó su preocupación: “Hemos estado analizando con las instituciones de tercer y cuarto nivel y vemos que hay una cartera que nos preocupa mucho porque supera los $180.000 millones de pesos”. Gómez Chacón detalló las medidas que se están tomando, incluyendo mesas de conciliación para el pago de cartera, gestiones ante la Superintendencia de Salud en Bogotá y negociaciones con EPS intervenidas. “Esta es una situación que nos pone en alerta y en riesgo, y lo que buscamos es que efectivamente se pueda generar un pronto pago para que la prestación de los servicios no se vea afectada”, agregó el funcionario.