Durante un debate de control político en el Concejo de Armenia, el concejal Felipe Villamil alertó sobre el crecimiento sostenido de la población habitante de calle en la ciudad, situación que —según explicó— no solo representa un desafío social, sino también un creciente problema de seguridad, salud pública y convivencia ciudadana.
Villamil fue enfático en señalar que la presencia de personas en situación de calle ha aumentado de forma notoria en diferentes zonas del municipio, y cuestionó la falta de una estrategia clara por parte de la administración municipal para enfrentar este fenómeno: “Hoy no hay una regulación frente al crecimiento de esta población. No se trata de negar su existencia, pero sí de establecer mecanismos que permitan mitigar su avance y atender adecuadamente esta realidad”.
Uno de los puntos que más inquieta al cabildante es la relación entre el aumento del consumo de sustancias psicoactivas y la percepción de inseguridad entre los ciudadanos. “La gente ya no camina tranquila, hay una sensación de miedo, porque si no acceden a una solicitud, pueden ser abordados de manera agresiva. Se ha vuelto una constante”, afirmó.
Además, denunció que algunos habitantes de calle estarían siendo instrumentalizados como intermediarios en el expendio de drogas, lo que agrava aún más el panorama. A esta situación se suma la carencia de infraestructura básica como baños públicos, lo que, en su criterio, agudiza los problemas de salubridad y deteriora el entorno urbano.
Villamil también planteó una discusión territorial al advertir que un porcentaje considerable de esta población no es oriundo del Quindío, por lo que propuso que la atención se enfoque en quienes pertenecen al departamento. “No es un tema hipotético. En otros departamentos han decidido atender solo a sus ciudadanos. Aquí debemos discutir qué enfoque tomaremos”, sostuvo.
Frente al presupuesto destinado a esta problemática, el concejal indicó que para la vigencia 2024 se asignaron 1.000 millones de pesos, de los cuales se habría ejecutado solo un 64% el año anterior. “No se trata de tener cifras, sino de ver acciones con impacto. ¿Dónde están los resultados? ¿Dónde está la ejecución visible en los barrios?”, se preguntó.
Ante estas afirmaciones, Jenny Gómez, secretaria de Desarrollo Social, respondió que la dependencia viene trabajando sin pausa en calle y que, aunque los avances aún no son suficientes, se han consolidado acciones importantes en prevención y mitigación. “Esta vez no quisimos mostrar documentos, sino el trabajo real del equipo en la calle. Nuestro objetivo es prevenir desde la comunidad y acompañar en la superación de vida en calle. Pero no podemos hacerlo solos”, aclaró.
Gómez recalcó que el abordaje del fenómeno requiere de una articulación más sólida entre secretarías como Gobierno, Salud y Desarrollo Económico, y que la comunidad también tiene un rol fundamental. Destacó avances en la sensibilización ciudadana frente a la mendicidad y la cultura ciudadana, además de procesos exitosos con adolescentes en riesgo de habitar la calle.
Sobre las metas del plan de desarrollo, anticipó que el centro transitorio de atención —uno de los proyectos bandera— está próximo a entrar en funcionamiento. “Sabemos que falta mucho, pero estamos avanzando. La prevención en colegios y la participación de líderes comunitarios ha sido clave para contener esta problemática en algunos sectores”, concluyó.

