Para reforzar la vigilancia y protección de recursos públicos destinados a atender la emergencia sanitaria derivada del Covid-19, el Gobierno ordenó a los jefes de control interno de las entidades públicas, revisar y ajustar los Planes Anuales de Auditoría con el fin de incluir seguimientos especiales a los procesos de contratación derivados de la emergencia económica.
A través de la Circular 10- 2020, se les pide a los jefes de control interno -como aliados estratégicos del Ejecutivo para la vigilancia de los recursos públicos- implementar medidas especiales y procedimientos inmediatos de verificación y seguimiento en la contratación, con la celeridad que demanda la crisis en todas las regiones del país.
Además, se les solicita una vigilancia especial a nuevos contratos, en el marco de la urgencia manifiesta; la Circular les señala la necesidad de hacer seguimiento para que las entidades identifiquen incumplimientos y responsables de procesos contractuales y establezcan correctivos y acciones de mejora. Este momento que vivimos -reiteran los funcionarios firmantes de la Circular- requiere que centren todos sus esfuerzos en mayor atención a la contratación pública para evitar que se materialicen hechos de corrupción y falta de transparencia