En las últimas horas se reunió la mesa de concertación salarial, que tiene un panorama positivo para ponerse de acuerdo. La ministra del Trabajo, Gloria Inés Ramírez, expuso que “Lo que queremos es proteger el valor adquisitivo del salario, con él tenemos que trabajar dado el impacto que tiene frente a lo que decidamos, buscamos una cifra que nos permita que las mayorías nacionales puedan dignificar sus condiciones de vida”.
La funcionaria agregó que “Desde el gobierno se tienen propuestas claras como: la desindexación de algunos productos, subsidios para agroinsumos y fertilizantes, transferencias efectivas para las poblaciones más vulnerables y afectados por la ola invernal, entre otros”, agregó.
Al respecto, el presidente de Fenalco, Jaime Alberto Cabal, resaltó la buena disposición del Gobierno Nacional para concertar el incremento que tendrán los colombianos en el salario mínimo y dijo: “Ojalá el 15 de diciembre podamos darles una buena noticia de un nuevo salario mínimo, que refleje la recuperación del poder adquisitivo de los salarios”.
El presidente de la CUT, Francisco Maltés, expresó la voluntad de llegar a un acuerdo e incluir otros componentes de política económica que permitan mantener el poder adquisitivo de los colombianos.
En la próxima sesión que se desarrollará este martes, el Banco de la República y el Dane, presentarán sus informes, que complementarán los expuestos en esta jornada por el Departamento Estadístico y los Ministerios de Agricultura, Comercio, Industria y Turismo y de Hacienda y Crédito Público.
De acuerdo con el experto económico Efraín Pachón, el aumento ideal para el salario mínimo para el 2023 debe ser del 13 %, lo que sugiere una cifra total de $1.130.000
Igual a la inflación
La propuesta es del 13%, igual a lo que cerró la inflación.
“Es posible que quede en este porcentaje, es decir, ascienda a $1.130.000, aunque la fuerza laboral está solicitando que este aumento sea del 20%”, indicó Pachón.
Agregó que si se aumenta mucho el salario, crece el desempleo, porque los empresarios no podrían pagar más con una mano de obra encarecida.
“Si el incremento se equipara a la inflación, ni empobrece ni enriquece al trabajador, le mantiene el poder adquisitivo, pero si le aumentan 10 % le están quitando en dos puntos porque ya la inflación le quitó $130.000, si lo dejan en 13 % lo dejan igual que el año pasado, es decir, que podrá volver a comprar más o menos todo lo de la canasta familiar”, concluyó el experto.