En relación con las recientes consultas diplomáticas entre Colombia y Estados Unidos, el presidente Gustavo Petro manifestó el 3 de julio su firme postura.
El mandatario expresó que no piensa “arrodillarse ni dejarse presionar” y que no le “asusta un congresista” que lo califique de “narcoterrorista”. Asimismo, Petro señaló que “esos que están llevando a Trump hacia rupturas en América Latina lo están haciendo para debilitar el frente organizado de batalla que tenemos contra las organizaciones del crimen”.
Ante la posibilidad de un distanciamiento con EE. UU., el presidente advirtió que Colombia “no se quedará sola” y que, si Estados Unidos no los apoya con los europeos, “no nos vamos a quedar solos”. Recalcó la importancia de identificar al verdadero enemigo, afirmando que “el enemigo no es ideológico, es criminal”.
Sobre la supuesta implicación de Marco Rubio en un golpe de Estado, Petro desestimó la idea, comentando que no cree que un gobierno con tantos frentes abiertos “se ponga a ‘pendejear’ con un golpe de Estado en la Gran Colombia”.