Ante la discusión en el Congreso de EE. UU. sobre un impuesto del 3.5% a las remesas, originado en una propuesta de Donald Trump, el presidente Gustavo Petro ha exhortado a los colombianos en dicho país a manifestarse.
Petro considera que esta medida afectaría el salario de los migrantes y propuso que Colombia responda con una tasa similar, basándose en el principio de reciprocidad.
El mandatario colombiano también compartió la postura de su homóloga mexicana, Claudia Sheinbaum, quien considera el impuesto “discriminatorio” y violatorio de tratados.
Este llamado de Petro se suma a un panorama de fricciones diplomáticas con EE. UU., influenciado por la adhesión de Colombia a la iniciativa china de la Ruta de la Seda, y en un momento en que las remesas de 2024 a Colombia, por 11.848 millones de dólares, han sido vitales para su economía.