Tras ignorar recomendaciones de la Corporación Autónoma Regional del Quindío, en la que se debe dar aviso previo a fumigaciones, alrededor de 2 millones de abejas murieron el pasado fin de semana en Barcelona.
César Delgado, miembro de la Asociación de Apicultores del Quindío y apicultor afectado, contó que agricultores fumigaron cultivos de cítricos aledaños a los apiarios de su finca en Barcelona, lo que ocasiono la muerte de no solo de 40 colonias de abejas nativas, sino de mariposas, colibríes, grillos, incluso murciélagos, los cuales ayudan al equilibrio de la naturaleza.
Añadió que se está ignorando las precauciones que se deben tener en cuenta para evitar el impacto de las fumigaciones con insecticidas. Con anterioridad, los apiarios deben ser cubiertos con mallas especiales y atenderlos con mecanismos que los protejan.
“También he pedido prudencia a los agrónomos quienes son los que recomiendan el tipo de agroquímicos que causan mucho daño a las abejas” añadió Cesar Delgado.