En los últimos días se presentó ante la Cámara de Representantes un proyecto de reforma constitucional que propone permitir el ‘transfuguismo’ por única vez en Colombia. Esta propuesta, liderada por miembros del Pacto Histórico encabezados por David Racero, cuenta con el respaldo de 120 firmas y tiene como objetivo habilitar a los congresistas para cambiarse de partido una sola vez, sin caer en la doble militancia. Esta modificación afectaría el artículo 107 de la Constitución.
El proyecto, conocido como ‘libertad política’, propone agregar un párrafo transitorio que autorice a los “miembros de cuerpos colegiados de elección popular o a quienes hayan renunciado a su curul antes de la vigencia del presente acto legislativo a inscribirse en un partido o movimiento político diferente al que los avaló sin renunciar a su curul o incurrir en doble militancia”. Según el texto, esta medida busca permitir la reorganización temporal de los actores políticos democráticamente elegidos, especialmente cuando se han visto respaldados por el apoyo popular mediante acuerdos de coalición.
Los promotores del proyecto argumentan que esta reforma es necesaria debido a la proliferación de partidos políticos y al uso generalizado de las coaliciones, lo que dificulta la distinción de posturas ideológicas y provoca conflictos entre los miembros de un mismo partido. Sin embargo, muchos políticos desisten de cambiar de partido debido a que esto les impediría volver al Congreso en las siguientes elecciones. Se ha mencionado que el proyecto también cuenta con el respaldo de congresistas de partidos de oposición.
Actualmente, el artículo de la Constitución que se busca modificar establece que “en ningún caso se permitirá a los ciudadanos pertenecer simultáneamente a más de un partido o movimiento político con personería jurídica (…) Quien participe en las consultas de un partido o movimiento político no podrá inscribirse por otro en el mismo proceso electoral”. Dado que se trata de un acto legislativo, el proyecto deberá pasar por dos vueltas en el Congreso, cada una con cuatro debates, para su aprobación.
