Desde la voz de Diana Ximena Álvarez Torres, tesorera del Sindicato Único de Trabajadores del Quindío, se hizo sentir el respaldo de los educadores del departamento a la convocatoria nacional impulsada por la Central Unitaria de Trabajadores (CUT). La jornada, desarrollada como un plantón cultural en la plaza de Bolívar de Armenia, tuvo lugar con el objetivo de expresar apoyo a la consulta popular propuesta por el Gobierno Nacional y a las reformas sociales en curso.
“Hoy tenemos un llamado desde la CUT a nivel nacional para que todas las organizaciones sociales y sindicales saliéramos a respaldar esta consulta y las reformas planteadas. Nosotros como maestros no podemos ser ajenos”, expresó Álvarez Torres, resaltando que la participación de los docentes en esta movilización no solo responde a una convocatoria sindical, sino a un compromiso ético y político con la comunidad.
Durante la actividad, el Sindicato de Maestros del Quindío promovió un espacio pedagógico en el que se distribuyeron las 16 preguntas que hacen parte de la consulta, con el propósito de informar y sensibilizar a los ciudadanos sobre el contenido y el alcance de la iniciativa.
“Estamos haciendo pedagogía porque creemos en la transformación desde el conocimiento. Aunque muchos de los puntos de la consulta no nos afectan directamente como gremio, sí nos tocan como parte del pueblo, como actores sociales comprometidos con nuestros estudiantes, con las comunidades educativas y con el país”, explicó la dirigente sindical.
El acto, según manifestó Álvarez Torres, no solo fue una muestra de respaldo a las reformas, sino también una defensa activa de la necesidad de modificar el Sistema General de Participaciones. En su opinión, este sistema requiere una reforma estructural que garantice más recursos para las entidades territoriales, especialmente en sectores como educación, saneamiento básico y acceso a agua potable.
“Hoy hay deficiencias evidentes en infraestructura educativa, en el acceso a servicios esenciales. Si esos recursos aumentan, podríamos avanzar hacia mejores condiciones de vida para nuestras comunidades. Esto no es solo una lucha de maestros; es una lucha por el bienestar colectivo”, concluyó.
La jornada cultural se convirtió en un espacio de encuentro entre gremios, estudiantes, ciudadanos y trabajadores del Quindío, que alzaron su voz para decir que las transformaciones sociales no pueden seguir esperando.