Un reciente estudio realizado por científicos de la Universidad College de Londres (UCL), publicado en la revista Brain, Behavior and Immunity, revela que el estrés económico puede tener un impacto más significativo en la salud que el duelo por la pérdida de un ser querido. La investigación, que involucró a casi 5.000 adultos mayores de 50 años, analizó varios factores de estrés, incluyendo el cuidado, la discapacidad, el duelo, la enfermedad y el divorcio, junto con la tensión financiera.
Los resultados mostraron que el estrés financiero se asociaba con niveles más altos de cortisol, una hormona producida en respuesta al estrés, así como con niveles elevados de proteína C reactiva (PCR), fibrinógeno y factor de crecimiento insulínico 1 (IGF-1), relacionados con la inflamación y el envejecimiento.
Según Odessa Hamilton, epidemióloga de UCL, el estrés financiero puede afectar de manera significativa la salud biológica debido a su capacidad para afectar múltiples aspectos de la vida, como conflictos familiares, exclusión social e inseguridad alimentaria o vivienda.
Aunque aún se necesitan más investigaciones para confirmar estos hallazgos, se sabe que el estrés crónico puede tener efectos adversos en la salud física y mental, aumentando la presión arterial, la frecuencia cardíaca y la actividad inflamatoria del sistema inmunológico, lo que potencialmente puede conducir al desarrollo de enfermedades físicas y mentales a largo plazo.
