El exalcalde de Medellín y precandidato presidencial, Daniel Quintero, mantiene firme su aspiración a la Casa de Nariño a pesar de las investigaciones judiciales en su contra.
En una entrevista con la revista Cambio, expuso su plan de gobierno, centrado en una profunda transformación estructural de Colombia, incluyendo una nueva constitución. Para Quintero, la Constitución de 1991 es obsoleta y el Congreso actual, un obstáculo para el progreso, perpetuando la corrupción. Propone disolver el Congreso y convocar a una Asamblea Constituyente para “resetear” el país.
A pocos meses de las elecciones de 2026, se presenta como un agente de cambio radical, independiente, según él, de ideologías de izquierda o derecha, priorizando la resolución pragmática de problemas. Su independencia económica, afirma, le permite una política libre de influencias empresariales o partidistas. Si bien apoya las ideas de Gustavo Petro, critica la ejecución de algunas políticas, especialmente en seguridad.
Quintero descartó participar en la consulta del Pacto Histórico de octubre, pero dejó abierta la posibilidad de participar en la consulta interpartidista de marzo.
Su campaña, basada en la recolección de firmas, busca un cambio sistémico, convenciendo a amplios sectores de la población, incluyendo a la derecha, para construir un país más justo.
Su mensaje central: Colombia necesita un “reseteo” del sistema.
