Jair Sebastián Serna Velásquez podría purgar una pena de más de 50 años.
El abogado defensor solicitó que fuera llevado a un centro de reclusión por fuera del Eje Cafetero para defender la integridad del joven.
A la cárcel
Luego de cuatro horas de audiencia, el juez cuarto penal municipal con funciones de control de garantías de Armenia dio medida de aseguramiento en establecimiento carcelario, con mecanismos de protección a Jair Sebastián Serna Velásquez, señalado de asesinar a la pequeña Salomé Puentes Arias y de intentar acabar con la vida en la modalidad de tentativa de feminicidio de Andrea Stephanía Arias Valbuena.
El sujeto no aceptó ninguno de los dos cargos; homicidio agravado y tentativa de feminicidio.
Los hechos
Durante la audiencia sostenida este jueves, se conocieron más detalles del caso, ocurrido el pasado 7 de febrero sobre las 2:00 de la madrugada.
Andrea recibió al menos 32 puñaladas.
De acuerdo con el testimonio de Andrea, Sebastián era celoso, nunca había agredido a la niña, “la regañó en algunas ocasiones porque era hiperactiva”.
Sobre si era violento, mencionó en la entrevista a las autoridades judiciales que no con ella, pero que la mamá de él, le había contado que en alguna oportunidad la estrujó para pedirle plata para comprar drogas.
Con Andrea en diciembre del año pasado llegó a mostrar su perfil celoso cuando ella se puso un vestido con una abertura en la pierna y él se lo hizo quitar.
Así mismo, con una amiga que llegó de Bogotá a visitarla, él aseguró que las vio besándose y se alteró por ello.
Consumidor de ‘perico’
Sebastián y Andrea se conocieron por redes sociales hace cuatro meses, él se encontraba en Pereira y ella en Armenia.
La joven viajó un día a conocerlo y empezaron a salir, y así mismo a “consumir mucho ‘perico'”.
El consumo se volvió tal que a Sebastián lo echaron de la casa, a la joven le dio pesar y lo acogió en su vivienda, ubicada en el lugar de los hechos, barrio La Colinas.
La noche fatal
El día de los hechos Andrea estaba en la cama con su hija, cuando llegó Sebastián y “estaba trabado porque llegó contento”.
A la 1:00 de la madrugada se levantó al baño “yo creo que a consumir porque se demoró mucho” y se acostó, anotó la joven a las autoridades.
Le besó la frente, le pidió perdón y empezó a golpearla y apuñalarla, su hija estaba cubierta de sangre, pues también le estaba pegando a la niña.
Se refugió y fingió estar muerta, esperando que la pequeña Salomé hiciera lo mismo, hasta que dejó de escucharla.
Él se bañó se cambió de ropa y se fue para la calle, las cámaras de seguridad darían cuenta de su actuar.
Se fue hacia ‘la cueva del humo’ a conseguir estupefacientes y luego fue hallado cerca a la zona y capturado con droga.
Durante la audiencia no aceptó los cargos que se le imputaron, pero fue llevado a un centro de reclusión.