El Juzgado Quinto Penal del Circuito de Armenia dictó sentencia de primera instancia contra Néstor Jaime Montoya Berrío, extesorero del Fondo de Empleados de la Universidad del Quindío.
La jueza Jenniffer Yorlady González Botache lo condenó a 108 meses de prisión y una multa de aproximadamente $208 millones por los delitos de hurto agravado y acceso abusivo a sistemas informáticos.
Montoya Berrío aceptó los cargos para recibir beneficios legales. Se le halló responsable de apropiarse de $769,799,211 aprovechando su cargo como asistente de operaciones de tesorería y ahorros.
El caso se inició por una denuncia del gerente José Fernando Jaramillo, junto con la contadora y la revisora fiscal del Fondo. Montoya Berrío, que trabajaba allí desde 1992, cometió el ilícito entre 2011 y 2020 mediante manipulación del software financiero.
La jueza consideró la gravedad del delito, que afectó a cerca de mil asociados del fondo. Aunque se le concedió detención domiciliaria, la defensa de las víctimas planea apelar para que cumpla la sentencia en prisión.
El Fondo de Empleados expresó satisfacción por el fallo, reafirmando su compromiso de proteger los intereses de sus asociados y enviando un mensaje claro contra este tipo de actos.