Ayer lunes 16 de septiembre se registró en el Quindío una nueva muerte autoinfligida, puntualmente en el municipio de Calarcá. Ángel Andrés Ortiz Sánchez, un hombre de 34 años, fue encontrado muerto en una zona boscosa cercana al barrio La Huerta. Vecinos que transitaban por el sector descubrieron el suceso cerca de las 5:00 p. m. y, al percatarse de la gravedad, alertaron rápidamente a las autoridades.
Policías del cuadrante correspondiente se desplazaron hasta el lugar para acordonar la zona y asegurar posibles evidencias. Lamentablemente, a su llegada confirmaron que Ángel Andrés ya no presentaba signos vitales. Posteriormente, el Cuerpo Técnico de Investigación (CTI) asumió el caso, realizando las diligencias necesarias y el traslado del cuerpo a la morgue local, donde se efectuó la necropsia al día siguiente.
Aunque las razones que llevaron a Ángel Andrés a acabar con su vida aún no han sido esclarecidas, los vecinos del barrio La Huerta expresaron su dolor ante su partida. Lo describieron como una persona bondadosa.
Este hecho se suma a una alarmante tendencia en el Quindío, donde ya se han registrado 33 muertes autoinfligidas en 2024.
La salud mental se ha convertido en una preocupación creciente en la región, lo que ha motivado a organizaciones como la Fundación Construyéndonos a ofrecer apoyo psicológico a quienes lo necesiten. A través de la línea de atención 606-7359950, disponible diariamente, se brinda orientación a personas en crisis o a quienes noten cambios preocupantes en sus seres queridos, con el fin de prevenir hechos que lamentar.
