En una reunión clave para la salud en la región, el gobernador Juan Miguel Galvis Bedoya se reunió con el agente interventor designado por la Superintendencia de Salud, Jorge Arturo Suárez Suárez, y el secretario de Salud departamental, Carlos Alberto Gómez Chacón. El objetivo fue analizar la situación actual y el futuro del Hospital La Misericordia en Calarcá, con la esperanza de restablecer su nivel de complejidad pre-crisis.
El agente interventor informó sobre los avances en la recuperación de servicios de primer nivel en La Misericordia, destacando la tranquilidad que esto ha brindado a la comunidad calarqueña y de la Cordillera. Sin embargo, hizo hincapié, junto con el gobernador, en la necesidad de trabajar intensamente para restaurar el segundo nivel de atención, especialmente en el ámbito quirúrgico.
Carlos Alberto Gómez Chacón, desde la cartera de Salud, subrayó la importancia de poner en marcha un amplio trabajo para recuperar componentes esenciales, como una infraestructura adecuada y un personal profesionalmente capacitado, en aras de fortalecer los servicios quirúrgicos.
Suárez Suárez añadió que la reciente evaluación de la Supersalud al hospital refleja una entidad saneada en materia financiera, fiscal y de atención. Este logro se considera crucial para el propósito de recuperación mencionado anteriormente, y se resalta la necesidad de un esfuerzo conjunto entre todos los actores del sector, el respaldo de la Gobernación y la Alcaldía, así como el compromiso del personal del hospital.
En la reunión también se discutió la activación completa de los servicios de atención primaria en el Centro de Salud de Barcelona, un imperativo para el gobierno departamental, comprometido con el bienestar de todos los quindianos. Esta medida busca fortalecer la red de atención médica en la región y garantizar una cobertura integral para la población.
