En un acto celebrado en Nuquí, Chocó, donde Iris Marín asumió como nueva defensora del Pueblo, el presidente Gustavo Petro realizó una declaración controvertida, llamando a las periodistas “muñecas de la mafia”. Esta afirmación ha generado una serie de reacciones y ha impulsado al abogado Germán Calderón España a presentar una tutela ante el Consejo de Estado.
Calderón busca que el presidente ofrezca una disculpa pública y se abstenga de hacer comentarios similares en el futuro, argumentando que el lenguaje utilizado tiene el propósito de dañar psicológicamente a las comunicadoras.
La tutela también responde a críticas previas de Germán Vargas Lleras, quien consideró que las palabras del presidente eran ofensivas y fomentaba una denuncia legal. Esta demanda se suma a una anterior contra el presidente, relacionada con otras acusaciones no fundamentadas sobre la familia Vargas Lleras.