Con una muestra de carácter y resiliencia, el equipo femenino de balonmano del Eje Cafetero obtuvo una valiosa medalla de bronce en los I Juegos Nacionales Juveniles y Parajuveniles 2024. La gesta tuvo lugar en el coliseo Multideporte, donde las locales enfrentaron a Bogotá en un partido lleno de tensión y emociones, imponiéndose con un marcador de 24-20.
El camino no fue sencillo. Tras sufrir una dura derrota en semifinales ante Antioquia (10-30), las quindianas llegaban al encuentro por el tercer puesto con las secuelas de un desgaste físico y anímico significativo. Sin embargo, desde el inicio del juego, las anfitrionas mostraron su intención de dominar el marcador, aunque la arquera rival frustró varios intentos claros de anotación.
En momentos críticos, el equipo visitante logró ponerse en ventaja, pero las locales reaccionaron con disciplina y estrategia durante el segundo tiempo. Con una defensa más sólida y un ataque oportuno, no solo empataron el encuentro, sino que tomaron el control del marcador hasta sellar su victoria.
El apoyo incondicional de la afición, compuesto por familiares, amigos y seguidores de las jugadoras, fue crucial. A pesar de los altibajos del partido, los gritos de aliento desde las gradas no cesaron, llenando el coliseo de energía y motivación para el equipo.
Esta medalla de bronce es un reflejo del esfuerzo y compromiso del balonmano femenino en el Quindío, confirmando su posición como una potencia nacional en esta disciplina y dejando en claro que, más allá del resultado, el verdadero triunfo está en la entrega y el corazón mostrado en la cancha.