El departamento del Quindío está tomando medidas preventivas ante la inminente llegada del fenómeno de La Niña, que según el IDEAM, podría consolidarse entre julio y septiembre de este año. Esta situación marca un cambio climático significativo tras la disminución del fenómeno del Niño que ha afectado al país recientemente.
El Sistema Departamental de Gestión del Riesgo de Desastres está alerta y preparado para responder a posibles emergencias, con planes de contingencia específicos para enfrentar los efectos de La Niña. La Udegerd (Unidad Departamental de Gestión del Riesgo de Desastres) acompaña reuniones de los Consejos Municipales de Gestión del Riesgo de Desastres, socializa el Plan de Contingencia Departamental y coordina la planificación de acciones a nivel local.
Juana Camila Gómez Zamorano, secretaria del Interior, enfatizó: “El clima ha jugado a nuestro favor pero debemos prepararnos, no solo como entidades, sino como comunidad, en las instituciones educativas, en nuestro trabajo, en nuestro hogar, con los planes de emergencia.”
Las implicaciones del fenómeno de La Niña incluyen un aumento en las precipitaciones, un posible incremento de riesgos como deslizamientos e inundaciones, y la necesidad de adaptar prácticas agrícolas y de construcción.
Se recomienda a la población mantenerse informada sobre las alertas climáticas, preparar planes de emergencia familiares, revisar y asegurar techos y sistemas de drenaje, y estar atentos a las indicaciones de las autoridades locales.
El Quindío muestra una actitud proactiva frente a los desafíos climáticos venideros, destacando la importancia de la coordinación entre entidades gubernamentales y la concientización comunitaria para mitigar los posibles impactos del Fenómeno de La Niña.
La preparación anticipada y la colaboración entre instituciones y ciudadanía son clave para enfrentar este fenómeno climático, asegurando la resiliencia del Quindío ante los cambios que se avecinan.