Con inspección en las chatarrerías de la ciudad, la administración municipal ataca la problemática con el robo de elementos del sistema de acueducto y energía. El trabajo ha arrojado ya resultados, así lo expresión el mandatario de los armenios José Manuel Ríos Morales.
El alcalde anunció que en el marco de la estrategia de seguridad, el batallón Cisneros se vinculó al acompañamiento conjunto con la Policía y la secretaría de Gobierno.
Apuntó que en inspección a las chatarrerías se encontraron con celulares, cables –de fibra óptima que piensan que son de cobre-, tapas de contador, barandas, tapas plásticas y metálicas de alcantarillado y sumidero.
“Esos cinco establecimientos se sellaron y estamos haciendo traslado a la Fiscalía para que se continúe con el proceso porque se está comercializando objetos robados y que están afectando significativamente a la ciudad”, apuntó el mandatario.
Recordó que en los últimos días en el barrio Arcoíris en donde a una tubería que lleva agua potable para 60.000 personas, se le están robando los ángulos. “Y el arreglo no rebaja de $6 millones más todo lo que tiene que ver con el movimiento del personal”, indicó el burgomaestre.
Ríos Morales destacó la frustración de las autoridades frente a la fragilidad de la Ley, que permite que estas personas que delinquen queden libres luego de la captura. “Porque el delito es excarcelable, entonces los dejan libres y ellos vuelven y roban y se la pasan en una puerta giratoria”.
Atraco y raponazo, los más denunciados
De acuerdo con el alcalde, el atraco y el raponazo representan el 70 % de los delitos que más denuncian los armenios.
Hizo un llamado al gobierno para que refuerce las leyes para garantizar la disminución de estos delitos.
El gerente de Empresas Públicas de Armenia, Jorge Iván Rengifo Rodríguez también hizo referencia sobre esta situación. Resaltó la redada en chatarrerías y el cierre de 5 de estas.
Indicó que se adelanta una avanzada institucional de contrarrobos y mal uso de los activos públicos.