Hoy, Los seguidores del heptacampeón del mundo de Fórmula 1, Michael Schumacher, mirarán este año el triste aniversario del accidente de esquí que dejó a su ídolo en el silencio. La cuestión sucesoria persigue a Mick, cuya sonrisa es fiel reflejo de la de Michael. Más aún en estos días, en que se recuerda el accidente sufrido por su padre, el «Kaiser», el 29 de diciembre de 2013 en la estación de Méribel, en los Alpes franceses. Son muy pocas las noticias que han trascendido desde entonces sobre el estado del expiloto alemán, que cumplirá 52 años el próximo 3 de enero. En los medios se filtran algunos comentarios de su antiguo jefe en Ferrari, Jean Todt, una de las pocas personas de la vida pública que lo visitan periódicamente.