El insomnio es un trastorno que afecta a casi la mitad de la población, según una reciente encuesta. Este problema tiene diversas causas, desde las preocupaciones diarias hasta trastornos específicos como el síndrome de piernas inquietas o la apnea del sueño.
En Latinoamérica, también se ha observado un alto riesgo de padecer apneas, según una encuesta realizada por Infobae. Esto refleja la importancia de abordar los problemas de sueño en diferentes regiones. En cuanto a los hábitos de sueño, muchos admiten tener prácticas poco saludables, como acostarse a diferentes horas o pasar tiempo frente a pantallas antes de dormir. Sin embargo, hay una creciente tendencia a dormir en camas separadas, conocida como “divorcio del sueño”.
Para mejorar la calidad del sueño, las personas recurren a diversas estrategias, como el uso de ruido blanco o marrón. Además, hay una creciente demanda de productos para dormir, como colchones de alta calidad y mantas pesadas, que ayudan a reducir la ansiedad y el estrés. Es importante destacar que el sueño no solo beneficia la mente y el cuerpo, sino que también es vital para el funcionamiento de los órganos internos.
Cumplir con un promedio de ocho horas de sueño por noche es fundamental para mantener un metabolismo adecuado y promover el bienestar físico y mental.
Entre los beneficios de dormir lo suficiente se incluyen la prevención de la obesidad, la reducción del estrés, la prevención de enfermedades cardíacas y la mejora de la memoria. Por lo tanto, priorizar el sueño es esencial para una buena salud en general.
