La cantidad de requisitos y dificultades para cumplirlos está desplazando a los hoteleros a la informalidad. Así lo dio a conocer el director de Cotelco, Eduardo Mejía, quien expuso la ‘parahotelería’ como el fenómeno que suma más de 1.000 establecimientos que están por fuera de la formalidad.
“La informalidad para nosotros es muy dura. Hay unas frases que se han acuñado, como la ‘parahotelería’. Reconozco que desde la institucionalidad se hacen todos los esfuerzos en identificar los establecimientos que operan informalmente pero es complicado”, apuntó el directivo.
Huéspedes apoyan
Explicó que los mismos huéspedes se prestan para apoyar la informalidad, al identificarse como familiares de los propietarios de la finca o casa.
Así mismo expuso que el nuevo código de Policía le quitó la posibilidad a esta autoridad de adelantar procesos que garanticen el cierre temporal de los establecimientos mientras se formalizan. La responsabilidad pasó a las alcaldías.
“Calculamos que estamos en unos 1.200 establecimientos que prestan alojamiento informal”, anotó el director.
El directivo expresó que la afectación es muy alta, pero que la normativa, además de la falta de capital humano los limita para actuar.
“La exigencia de requisitos y las dificultades para cumplirlos puede llevar a que los hoteleros digan ‘si están dificultando el proceso y hay otros que prestan el servicio sin cumplir nada, entonces me vuelvo informal’, es un riesgo que estamos corriendo”, expuso Mejía.
Turistas corren riesgos
Hizo un llamado a los turistas para que verifiquen que los hoteles donde se quedan cumplan con la regulación, porque así se garantiza atención, cobertura y cualquier eventualidad que tengan sea cubierta por las empresas de seguros y no corran riesgos a futuro que luego un alojamiento barato les puede salir más costoso.
Recordó el hecho del año pasado en donde una cabaña se derrumbó y dejó atrapados a dos turistas que fallecieron.
Señaló que tanto en zona rural como urbana se evidencia la situación y recordó los riesgos y amenazas que se pueden presentar en la informalidad sumado al invierno. Esto en el caso particular de la cabaña que se derrumbó y dejó dos víctimas mortales en Salento en marzo del año pasado.

