En el hospital Santa Ana de Pijao, continúa la crítica situación más que por falta de recursos, por el embargo de sus cuentas, por lo cual les adeudan dos meses y medio de salario a los funcionarios y está cerrado para la atención en medicina general.
Así lo informó la gerente de la IPS Diana Giraldo, quien expuso que el hospital está funcionando a medias, pero luchan por salir adelante.
Aclaró que tienen habilitado el servicios de urgencias y tramitan el de crecimiento y desarrollo y maternas.
“No se les ha pagado a los funcionarios porque tenemos las cuentas embargadas. La plata sí la hay, pero por una demanda que ya todos conocen, hasta que no se haga un acuerdo de pago no se puede desembargar”, sostuvo la gerente.
Agregó que se trabaja en ese trato para liberar los recursos, “se han hechos tutelas, derechos de petición, todo lo correspondiente, pero es un proceso lento”, expuso Giraldo.
Mencionó que se está haciendo todo lo humanamente posible, que no es una situación fácil para los usuarios, pero están contrarreloj tratando de solucionar y sacar el hospital adelante.
