Tropas de la Octava Brigada del Ejército Nacional en coordinación con la Brigada Contra la Minería Ilegal, el Batallón de Inteligencia Militar N.°5, el Comando Aéreo de Combate N.°1 y el CTI de la Fiscalía, lograron incautar maquinaria y elementos con los que se realizaban explotación ilícita de yacimientos mineros, quienes usaban la modalidad de sistema cúbico y tipo dragas para la extracción de oro aluvial.
En la zona rural de los municipios de Samaná, Norcasia y Victoria, departamento de Caldas, en labores de infiltración pedestre y de control contra la extracción ilícita de minerales, fueron intervenidas tres unidades de producción minera donde se extraía oro en diferentes modalidades, y donde, además de utilizar mercurio y cianuro, ya se habían afectado cerca de cinco hectáreas de capa vegetal y contaminaban las fuentes hídricas que desembocan en el río La Miel y Samaná. Esta operación tuvo lugar en las veredas Buenavista en Samaná, Jagual en Norcasia y el corregimiento de Isaza en Victoria, donde fue incautado un motor de arrastre, 250 metros de guaya de acero, infraestructura de transporte de material, una piscina de selección de material, cuatro dragas, cuatro motobombas, cuatro compresores, cuatro canaletas de selección, cuatro tubos de succión de 8 pulgadas, 70
metros de mangueras, 80 galones de gasolina y demás materiales para la actividad ilícita, además se destruyó un cúbico de extracción de 10 metros de profundidad.
El aprovechamiento ilícito de minerales en estos municipios del Oriente de Caldas se ha
realizado sin contar con el título minero legal, estipulado en la Ley 685 de 2001, del
Código de Minas, lo que ha afectado no solo los recursos naturales, sino el bienestar y la
seguridad de las familias que viven y se benefician legalmente de estas fuentes hídricas.
Se estima que en estas unidades de producción ilegal se estarían extrayendo 2.300 gramos de oro mensuales, lo que equivale a un ingreso promedio por venta de 660 millones de pesos al mes. Afectando así esta economía ilegal por un valor mensual aproximado de 725 millones de pesos.
Con estos resultados se logra una reducción significativa del impacto ambiental. Es de
resaltar que el valor que se invierte para la recuperación del daño ambiental es de 750
millones de pesos aproximadamente y podría tardarse entre unos 20 a 30 años.